Los alumnos del Grado de Diseño de Producto de la Escola d'Art i Superior de Disseny de les Illes Balears (EASDIB) y los de bachillerato del IES Politècnic han participado en un innovador taller-concurso de diseño y reciclaje, cuya entrega de premios tuvo lugar ayer en este centro universitario. El objetivo era la creación de lámparas con material reciclado, uniendo equipos de diversas edades. El proyecto ha contado con el apoyo de la Fundació Deixalles y Ecoembes, que ha financiado esta iniciativa y ha otorgado premios de 500, 300 y 100 euros a los tres diseños seleccionados.

Promover la importancia del reciclaje y el trabajo en equipo han sido los objetivos que el centro EASDIB ha querido fomentar con esta experiencia formativa. "Este taller se enmarca en la línea industrial de Co-upcycling, que une los conceptos de diseño colaborativo y supra-reciclaje, convirtiendo residuos en objetos de valor", explica la responsable del departamento de Diseño de Producto de la EASDIB, Irene Mestre. Por su parte, la jefa de estudios del IES Politècnic de Palma, Eva María Vives, comenta que "el alumnado está acostumbrado a una clase magistral, no a trabajar en equipo, por lo que se agradece esta experiencia". Este instituto enmarca esta actividad en su séptima Semana de la sostenibilidad. "Hoy en día es difícil la colaboración entre escuelas y menos en proyectos prácticos de este tipo que las instituciones públicas no subvencionan ni fomentan", añade Vives.

La iniciativa permite que la teoría docente se convierta en acción, ya que los alumnos desarrollan un producto real. Como comenta Mestre, "es un proyecto que permite interrelacionar conceptos y llevarlos a la práctica, al que hemos dotado de entidad propia dentro del programa formativo de la EASDIB, y nos gustaría que tuviera continuidad".

¿Tendencia o consciencia?

La EASDIB apuesta por el reciclaje como una herramienta de futuro para los diseñadores de producto que, como afirma Mestre, "es tendencia, pero no sé hasta que punto consciencia". Vives añade que "la escuela debe dar ejemplo de la educación ecológica, pero si en el entorno familiar no existe, no se recicla".

Asimismo, este taller se engloba en una línea de trabajo actual basada en el diseño colaborativo, un enfoque usado para tratar activamente todas las partes implicadas en un proyecto (desde el creador al usuario), de cara a asegurar que el produto resultante se ajuste a las necesidades reales.

Las 13 lámparas recicladas hechas por los equipos de alumnos mixtos, universitarios y bachilleres, se expondrán en una sala de la EASDIB durante varias semanas, junto a los plafones que explican el proceso de creación de cada una de ellas.