¿Qué es el amor? Con esta pregunta empieza la obra Sensible, un espectáculo creado por el director Juan Carlos Rubio y el coreógrafo Chevy Muraday, basado en la novela epistolar de Constance de Salm, Veinticuatro horas en la vida de una mujer sensible, publicada en 1824, en la que una mujer madura pasa por todas las etapas del calvario al descubrir la supuesta traición de su joven amante. El espectáculo divide el escenario en dos mundos, el de la palabra y el de la danza contemporánea. Mientras que el coreógrafo se encarga de defender el universo de la danza siendo Alfred, el protagonista masculino, es la actriz Kiti Mánver dando vida al personaje de Constance quien se adueña de la palabra. La obra se representará hoy a las 21 horas en Trui Teatre.

Los dos intérpretes de Sensible coinciden en que el espectáculo es “arriesgado” y “valiente”. A la vez, Mánver y Muraday cuentan que tiene una gran capacidad de conectar con el público porque trata un tema universal. “La gente se emociona porque, ¿quién no ha vivido el desamor? ¿La desesperanza? No es una obra ajena, hablamos del amor con mucha verdad”, explica Muraday. La actriz asegura que es una creación que no deja de conmover a nadie porque es “muy dura”, y subraya la capacidad del director para “conseguir siempre pellizcar el corazón de la gente”. Para la actriz es muy “esperanzador” que un montaje tan poco convencional como es el de Sensible atrape al público de la manera que lo hace.

En la representación, los dos personajes no tienen contacto, simplemente comparten el escenario, al que consideran un personaje más de la obra. El diálogo entre las dos disciplinas, la palabra y la danza, se ha planteado de una manera tan “orgánica y honesta”, según el coreógrafo, que ha conseguido que una no tenga sentido sin la otra cuando, en un entorno teatral y con un texto tan “melodramático, trágico o intenso”, como dice Mánver, parece que lo que más tiene que brillar es la parte de la palabra. Teniendo en cuenta las reacciones del público que los intérpretes han podido conocer, “te das cuenta de que Rubio ha sabido equilibrar totalmente los dos universos”, apunta el coreógrafo.

Según Mánver, la adaptación de Rubio de la novela de De Salm “es una versión muy inteligente porque habla de la toxicidad del amor, algo que la gente entiende y se cuestiona”.

Teatro para reflexionar

Tratar el amor con todas sus versiones y gamas, tratar el amor que desgarra, provoca, según la actriz, que Sensible sea una de esas funciones que “no se olvidan rápido, sino que es de las que dan para varios debates de los asistentes”. Mánver reivindica ese “poder del teatro” de plantear dudas, preguntas, cuestionar los estereotipos y conmover al espectador. “Eso es maravilloso”, dice la actriz, quien asegura también que el teatro sigue siendo “el rey” al respecto de sacudir conciencias.