El canario Pedro Guerra encandiló el viernes por la noche a sus fieles mallorquines en el Trui Teatre, en un concierto de su gira Arde y Vuela, con el que regresaba a la isla tras años de ausencia.

El público no fue masivo, pero sí entregado. Guerra ofreció su versión más reivindicativa, con canciones del trabajo Arde Estocolmo, e intimista, con el disco 14 Ciento Volando de 14, que pone música a sonetos de Joaquín Sabina.

Sus nuevos títulos llegaron a acompañado de clásicos del artista, como la canción Contamínane o El Marido de la Peluquera. Antes de Pedro Guerra, actuó el mallorquín Bruno Sotos, dentro del ciclo Coca - Cola Concerts, que continuará en el mismo escenario el día 20 de octubre con David Otero y Jalo.