Desde que Steven Spielberg estrenó Tiburón (1975) los escualos casi han creado un género. El verano pasado, en Infierno azul, un marrajo se interpuso entre una surfera y la playa; este año entre dos hermanas y la superficie del mar. A 47 metros cuenta con guión del mallorquín Ernest Riera, compartiendo crédito con el director del filme, el británico Johannes Roberts.
El principal problema del género es la limitación de opciones al elegir a las (inocentes) víctimas: bañistas, surferos, ¿palistas?, pescadores quizás (menos glamourosos) y buceadores. Embarcaciones más grandes, descartadas. El segundo reto es encontrar un equilibrio entre acción dramática y verosimilitud. El listón es muy variable según las aspiraciones de cada película. Aquí buscan a un público poco exigente que se conforma con un puñado de sustos y medio de escalofríos. Ese público saldrá razonablemente satisfecho porque la acción es constante y el parloteo de las chicas (aunque se salten la regla más básica de supervivencia bajo el agua) es empático. También se agradece del guión que dosifique las apariciones de los escualos y alterne con entradas y salidas de la jaula y situaciones MacGyver para que la película no acabe ni antes de tiempo ni como no desea el respetable. La dirección es también meritoria, con buen ritmo, jugando bien con cámaras e iluminación. La pareja de chicas ponen palmito el escaso tiempo que están fuera del agua. Matthew Modine, el único actor con cierto renombre, cumple con un papel sencillo. La película es lo que es. Y no es poco mérito que el guión de un isleño haya sido producido por los hermanos Weinstein.
A 47 metros
**½
Nacionalidad: Estados Unidos, 89 min.
Director: Johannes Roberts.
Actores: Mandy Moore, Claire Holt, Matthew Modine.
Cines: Ocimax, Cinesa Festival Park, Multicines Manacor.
