Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Entrevista

Sebastià Mascaró: "Soy un director de transición, mi sucesor debe entrar por concurso"

El educador remodelará los usos del Casal, que continuará con mejoras

Sebastià Mascaró, ayer, junto a un conjunto de piezas de Pep Guerrero instaladas en el Solleric. b. ramon

P ¿Cuáles son sus prioridades?

R La programación a partir de septiembre ha sido lo más urgente porque en agosto se acababa todo. Hay un proyecto que no está cerrado aún, que es el del Dipòsit (antes Aljub). Para este espacio, me gustaría invitar a algún artista local para que trabajara sobre algún proyecto relacionado con el aceite. Así recuperamos también la memoria de los usos del propio casal, otra de las líneas que me interesa trabajar e investigar. La mediación es otra prioridad. Estamos con la programación escolar, que arrancará en el curso 2017/2018. También me estoy reuniendo con diferentes colectivos sociales que están relacionados con las exposiciones que tendremos. Para la muestra de Carmela García ya he hablado con Rosa Cursach del IB Dona y trabajaremos con mujeres víctimas del maltrato. Para la de Pepe Miralles, en torno al VIH, estoy en conversaciones con ALAS. Miralles hará un trabajo en las bibliotecas públicas y en el espacio urbano. La idea es poder llevar las exposiciones más allá del Casal: trabajar los contenidos en la ciudad y en las barriadas de Palma. Con el ciclo de memoria histórica que anuncié, y que abrirá Sánchez Castillo, me gustaría que hubiera mesas de debate. Y tener en cuenta a artistas locales jóvenes que ya han trabajado sobre este tema.

P ¿Hablarán sobre Sa Feixina?

R Sí. Y eso es lo sano. Es un debate social y se ha de poder hablar. Y tiene cabida cualquier opinión. Querría que viniera gente de los dos bandos. Todos serán invitados. Lo que me gustaría con este cambio en el Solleric es que las artes visuales nos dieran pie a hablar de temáticas transversales y que sean un dispositivo de debate y reflexión.

P ¿Desea abandonar la vertiente más estética o metaartística?

R No estoy cerrado a exposiciones que no traten de temática social.

P Corre el riesgo de convertir el Solleric en un museo de tesis.

R No. Es cierto que me he centrado en esta programación en estas cuestiones para acercarnos a estos colectivos. Pero no me cierro a revisiones artísticas contemporáneas de los años 90 o de lo que se hace ahora mismo. O a individuales o colectivas de otro tipo.

P También corre el riesgo de que Cort haga electoralismo con su programación por las temáticas que trata: género y memoria histórica.

R Es cierto que alguien lo pensará. Yo no soy político, pero sé que mi cargo está bajo una regidoría. También soy consciente de que estos temas, que vengo trabajando desde hace muchos años en Es Baluard, encajan con la política de Més. Pero pienso que es un encaje natural, no político. Fueron ellos los que me vinieron a buscar e, insisto, yo no estoy afiliado a ningún partido.

P El otro día comentó que se irá cuando acabe la legislatura.

R Sí. Dentro de dos años yo me iré. Y se ha de convocar un concurso. El otro día me reuní con la AAVIB y les dije que no me había presentado al concurso porque buscaban un perfil de comisario y no de mediador y educador. Por eso ya no opté. El cambio ahora ha sido este: que un educador y mediador pueda gestionar un centro de arte. Y sí, es una dirección general y el mío es un cargo de confianza política elegido a dedo. He aceptado el cargo porque pensaba que había una situación de bloqueo después de los dos concursos. Una situación en la que un centro estaba parado, no se daba oportunidades de trabajo a nadie y un tercer concurso lo veía inviable en estos momentos porque nos hubiera llevado a un tercer o cuarto año.

P La primera vez que se lo ofrecieron dio una negativa. ¿Qué pasó para que aceptara?

R Dije que no, al menos hasta que se aclarara qué había pasado con el concurso y ver qué pasaba con el finalista, si impugnaba o no. Después me volvieron a llamar. Y pedí una serie de cosas.

P ¿Qué condiciones puso?

R Independencia de criterio a la hora de programar y trabajar. También poder poner en marcha todo el tema de la mediación.

P ¿Volverá a haber coches aparcados o enchufes en el Solleric?

R No. Hay unos criterios y unas líneas y se me dijo que se iban a respetar.

P ¿Se siente menos legitimado al no haber pasado por un concurso?

R Me siento legitimado ahora mismo debido a las circunstancias. Y hay un hecho muy claro: después de mí pienso que se ha de hacer un concurso.

P ¿Va a dejar cerrado ese concurso cuando se vaya?

R Me gustaría dejarlo todo cerrado para que así sea. Y evitar que haya un vacío para cuando haya un cambio. Yo soy un director de transición. Y no es que venga en plan salvador.

Por otra parte, creo que es un momento en que líneas como el género o el tema LGTB están generando un debate muy fuerte. Y me parecía una lástima que no se pudieran tratar estas cosas porque el Solleric estuviera bloqueado. Me gustaría también que después de estos dos años la parte de mediación ya estuviera consolidada y se quedara esto venga quien venga.

P ¿Cómo va a trabajar la participación?

R Hay dos tipos de participación: la que debe darse con el sector cultural y la ciudadana. Esta última consiste en crear canales -esos canales son las mediaciones con la sociedad- y en la sostenibilidad del trabajo con los diferentes colectivos.

P Trabaja básicamente con dos comisarios.

R Hay una serie de líneas programáticas propias en las que yo he contado con dos comisarios: Tolo Cañellas y Neus Cortés. Lo que no puede ser es hacerlo todo por convocatoria porque al final es como una repartidora y ha de haber unas líneas claras de trabajo profundo. Ahora saldrán unas líneas de ayudas públicas para comisariados y otra para artistas, que he compensado económicamente después de presentarlas el otro día. La participación con el sector también se vehiculará a partir del consell municipal de Cultura, que en otoño será una realidad.

P ¿Se tendrán en cuenta todas las voces?

R Intentaremos que esté todo el mundo. Hay gente que no se ha sentido representada por las asociaciones. Y se ha de tener en cuenta la diversidad. Yo mismo no me sentía representado por ninguna asociación. Y de Taula salí, por ejemplo.

P A pesar de las convocatorias, otra de las quejas que se repiten es que siempre las ganaban los mismos.

R He tomado medidas. La comisión que escogerá los proyectos serán todos profesionales de fuera de la isla. E introduciremos una cláusula: la gente que haya tenido proyecto expositivo durante 2017 en el Solleric no se podrá presentar. Lo mismo para 2018. Sólo se tendrán la oportunidad de hacer un proyecto por año.

Compartir el artículo

stats