Después de ver esta película uno comprende la paradoja del periodista Michael Herr. Su magistral ensayo Despachos de guerra (1977) no ha sido trasladado a la pantalla; sin embargo el autor fue invitado por Francis Coppola y Stanley Kubrick a reforzar los guiones de Apocalypse Now y La chaqueta metálica.
El escritor portugués Antonio Lobo Antunes fue destinado como médico castrense al conflicto colonial de Angola entre 1971 y 1973. De la correspondencia que envió a su mujer, embarazada entonces, Ivo Ferreira ha reconstruido su estancia en el país africano. El guión por tanto es la voz en off de esas cartas, más alguna respuesta de la mujer y puntuales diálogos in situ. Son textos entre buenos y sublimes (la añoranza del roce físico con su mujer, la descripción de una boda entre una preadolescente y un viejo de una tribu local). Y explica con acierto el dilema, el objetivo final, de los soldados rasos o los rangos inferiores. Regresar a casa sanos, cueste lo que cueste. Acierta el realizador con la fotografía en blanco y negro, que remite a obras maestras del género bélico o insurgente como varias de Andrei Wajda o Soy Cuba de Kalatozov. Se topa sin embargo con varias alambradas invisibles: muchos detalles del conflicto armado están (obviamente) autocensurados en esas misivas. Además fue un conflicto de mucha menor intensidad que Vietnam o la llegada al poder de los castristas. Y el actor protagonista, Nunes, es muy blandito. El balance del filme es positivo, por la fuerza de los textos y el recordatorio de la insensatez de ese tipo de conflictos.
Cartas de guerra
***½
Nacionalidad: Portugal, 105 min.
Director: Ivo Ferreira
Actores: Miguel Nunes, Margarida Vila-Nova, Ricardo Pereira
Cines: CineCiutat