Para Pau Donés la vida es un regalo al que hay que perderle el miedo y no mirar tanto al pasado. Tampoco pensar sólo al futuro, sino disfrutar del presente. Superviviente y enamorado de la vida por igual, el cantante de Jarabe de Palo celebra sus 50 años y los 20 del grupo con gira, disco y libro, publicado por Planeta. Un triple trabajo al que llama 50 palos. Su regreso a los escenarios con las canciones de siempre, grabadas en acústico, más una nueva. Una celebración que llega este viernes al Trui Teatre a las 21 horas.
¿Hay alguna diferencia entre Pau Donés y Jarabe Palo?
No, la verdad y de primeras me sería muy difícil diferenciar a la persona del personaje. Aunque tampoco lo he hecho nunca, no he sabido.
Ha regresado a los escenarios por la puerta grande. Gira, disco y un libro.
Son mis 50 años y 20 de Jarabe de Palo. Podíamos celebrarlo simplemente con un nuevo disco y salir a tocar. O podíamos hacer algo distinto y grabar en acústico. Las canciones están hechas sobre todo a piano y voz, con el acompañamiento de un instumento de cuerda. También la gira es diferente, mucho más cercana y emotiva. Son las canciones conocidas de Jarabe más una nueva.
En el libro dice que se debe perder el miedo a la vida, ¿a qué se refiere?
Hay dos maneras de vivir. Decidir por ti mismo o dejar que otros decidan por ti. De la segunda forma asumes menos riesgos porque es más difícil fracasar. Son los otros los que meten la pata. Y en una sociedad en la que el fracaso está mal visto, es mejor no equivocarse. Pero si decides por ti mismo te arriesgas y si fracasas tienes que hacerlo sin miedo. Porque de los errores se aprende. Siempre es mejor tomar las riendas de tu vida y no temerle a las equivocaciones.
Y en estos 50 palos, ¿qué ha aprendido?
En el libro hago un buen resumen de esto. Destaco que la vida es urgente. Que tenemos que vivirla con intensidad y en presente. No vivimos lo suficiente el ahora porque pensamos demasiado en el pasado y en el futuro.
¿Se considera un superviviente, un enamorado de la vida o ambas?
Las dos. Todos somos supervivientes cuando estamos vivos en un mundo difícil. Y desde luego que soy un enamorado de la vida. De eso trata el nuevo tema, Humo. Es una canción de amor a la vida.
Su primer baile con la muerte fue cuando su madre se suicidó. ¿Qué aprende en un momento así un adolescente de 16 años?
Pierdes el miedo y te hace valiente. Te das cuenta de que debes vivir como quieras. En mi caso, toda mi vida he sido muy libre, he hecho lo que mi instinto me decía. También aprendí que todos estamos en contacto con la muerte, aunque no la veamos ni seamos conscientes. Pero no ha que tenerle miedo, sino ser muy consciente d que la vida es un regalo.
¿El cáncer le ha inspirado de alguna manera?
No me ha inspirado ni me ha enseñado nada. Es una enfermedad crónica, una putada. Algo con lo que has de convivir y que sufro cinco minutos al día. Hay cosas que me han marcado más que el cáncer, como el nacimiento de mi hija o mi primer disco.
Muchas veces ha dicho que es una persona soñadora, ¿son sus canciones producto de sus sueños?
Son una combinación entre mis sueños y mi realidad. No hay nada malo en perseguir los sueños. Lo más importante es vivir la realidad intentando alcanzarlos. Es lo que le da sabor a la vida.
¿Hay algo de lo que se arrepienta o desearía haber hecho?
He cometido errores y he aprendido de ellos. Pero no me arrepiento de nada. Lo que si es cierto es que me quedan muchas cosas por hacer. Siempre he pensado que aún tengo que escribir la mejor canción de Jarabe de Palo. Hay compañeros con los que quiero tocar. Quedan cosas por hacer y no sólo en el ámbito de la música, también de la vida.
En cuanto al concierto del viernes, ¿han preparado alguna sopresa?
La sorpresa será el concierto. Hemos tocado muchas vece en Mallorca, pero ninguna como esta. Es un formato distinto. La gente no ha escuchado La Flaca o El lado oscuro en acústico, sólo con piano, voz y un instrumento de cuerda.
