Huele, por los rótulos al final del filme, a venganza servida al dente. La acción ocurre en 1983, en pleno régimen comunista en la entonces Checoslovaquia. Una profesora llega a un centro de educación de secundaria. El primer día pregunta a los alumnos sus nombres y profesión de sus padres. En paralelo se muestra una tormentosa reunión de padres con la directora del centro. Varios de ellos han denunciado a la profesora por corrupción, por exigirles 'favores' de todo tipo a cambio de un refinado juego de favoritismos y castigos con los niños. La directora no puede tomar represalias inmediatas porque la denunciada es la comisaria política de la escuela.
Esta película checa es una versión más tosca, menos dramática, de la reciente rumana El examen. Pero a pesar de cierto maniqueísmo, La profesora es amena. Al principio crea un pequeño mcguffin, después entra a saco con flashbacks y desunión entre padres. Y profundiza bien con el tema. Ambos filmes muestran que la corrupción no se produce sólo en esferas políticas y contratos públicos. Y la difusa frontera entre picaresca e injusticia delictiva. Y lo fácil que es caer (para los desalmados) en la corrupción y lo difícil que es para los más íntegros escapar de ella. Ponerse las orejeras con la excusa, bastantes veces válida, de anteponer la supervivencia o, en este caso, el bienestar futuro de los hijos. Aunque la acción trascurra hace treinta y pico años y bajo un régimen comunista, las noticias que leemos cada día en los diarios muestran que pocas veces remite con las democracias. Cualquier recordatorio de su (maldita) efectividad siempre es agradecido.
La profesora
***½
Nacionalidad: Chequia, 112 min.
Director: Jan Hrebejk
Actores: Zuzana Maurery, Ksongor Cassai, Tamara Fischer, Martin Havelka
Cines: Augusta, CineCiutat
