Pese a su corta trayectoria, Ana Cabello (Inca, 1987),ha conseguido cautivar con su obra a galeristas, coleccionistas y artistas que han visto en su trabajo una singular mirada llena de humor y ternura a la vez, alejada de los estereotipos de género y vinculada a un modelo de empoderamiento del hecho artístico. Tras sus estudios de Bellas Artes en Barcelona y Rotterdam, compagina sus presentaciones artísticas con otras actividades que van desde el diseño para revistas, portadas de libros o sus colaboraciones con el restaurante ca na Toneta. Ahora acaba de presentar su primera serie de litografías producidas en el Taller 6A.
Esta primera incursión en el mundo del grabado la ha saldado con una muestra de tres litografías. Es interesante constatar que al margen de la exposición de estas obras también muestra las planchas litográficas que han servido para imprimir ese trabajo y en ellas descubrimos la excelencia obtenida en el proceso ya que ha debido hacer una plancha para cada color impreso, un hecho destacable teniendo en cuenta esta tradicional técnica de estampación que solo imprime un color en cada prensada.
Si la litografía ha sido un aprendizaje, la pintura, que también exhibe en la galería, muestra una definida acción hacia la cultura popular de la que extrae todo su imaginario y le sirve para lanzar un contundente mensaje al que ya alude desde el título de la exposición.
Ese "nadie te pidió que me salves" no es tanto una proclama como la convicción de que de sus "monstruos ya me ocupo yo". Para trasmitirlo en acrílico se inspira en las imágenes de los carteles cinematográficos de la década de los años 50 a 70, cuando los verdaderos artesanos de la pintura mural realizaban grandes pintadas con alguna escena o personaje principal de la película que se proyectaba en en local
Sin la nostalgia de aquellos años, la pintura de Ana Cabello aborda a modo de homenaje esa fuerza que como mujer y artista esgrime frente a la imagen desvalida que expresaban aquellas películas frente a los monstruos que las amenazaban. Con una estética extraída de las publicaciones pulp y sin perder el hálito del Pop Art, su obra se asienta en su personal visión de aquellos personajes de película y frente a ellos se sitúa la mujer que domina al monstruo, dejando unas imágenes sobre madera, llenas de ternura y con un cierto aire romántico.
King Kong, Godzilla y la divertida criatura del doctor Frankenstein, entre otros, revelan una obra de una factura sencilla y eficaz, sin necesidad de ornamentar con otros argumentos el objetivo que se impone la artista, compone una serie de pintura y grabados que van más allá del divertimento y del homenaje.
Ana Cabello
No one asked you to save me
6a Galeria d´Art. Palma
Hasta finales de abril
