El coloquio internacional. L'art contemporani a la Catedral de Mallorca: L'obra de Miquel Barceló a la capella del Santíssim deu anys després, contó ayer con la participación de Biel Mesquida, Vicenç Altaió, Agustín Fernández Mallo y Fernando Castro Flórez en una mesa redonda sobre la creatividad y lo sagrado. El debate tuvo lugar en el auditorio de CaixaForum Palma bajo el título La creativitat entorn alló sagrat. El objetivo de los ponentes era el de llegar a la conclusión de si existe una relación entre el arte y la religión.

A efectos del programa, la mesa redonda debía moderarla Fernando Castro Flores, pero fue Biel Mesquida el que terminó asumiendo dicho rol. "Mis compañeros han preparado pequeños monólogos sobre un tema magnífico, el arte y la religión. Lo sagrado es tan parte de nosotros como lo son el arte y la creación. Está en nuestro interior", explicó el escritor y biólogo.

Reflexiones de los ponentes

El primero en intervenir fue Vicenç Altaió, al que Mesquida calificó de buen amigo y un gran escritor, comisario y crítico de arte. Altaió recordó la importancia histórica de la película El Evangelio según San Mateo del director italiano Paolo Pasolini. "Pasolini era un reconocido ateo que rompe con la idea de que alguien no religioso pueda hacer arte ligado a lo sagrado. Yo soy agnóstico y he mirado la capilla de Barceló como tal. Pero tras escuchar a Mercè Gambús manifestar en su ponencia que la liturgia es el programa, he vuelto a la capilla. Me senté, presencié toda la ceremonia y vi ese objetivo litúrgico del que hablaba Mercè. Hay unos vasos comunicantes que conectan religión y arte. Lo sagrado proviene de la forma y la no forma de la que estamos constituidos, pues nosotros somos sustancia divina", explicó Altaió.

"Fernando Castro Flórez es profesor de Estética en la Universidad Autónoma de Madrid, crítico de arte y además ha comisariado una barbaridad de exposiciones", contó Mesquida al presentar al segundo ponente. Castro, sin pelos en la lengua, aclaró que su opinión sobre Miquel Barceló es nefasta. "No voy a entrar a valorar su obra, por lo que corramos un tupido velo. Para mí, la relación entre lo sagrado y el arte es antigua. La idea de la desacralización es una falsedad. Sobre todo hoy en día, que considero que religión y creación están muy cerca. Muchos artistas sienten curiosidad por lo sagrado, aunque lo manifiesten de una forma provocativa", aseguró Castro.

"Agustín Fernández Mallo es físico y un reconocido escritor originario de A Coruña que reside en Palma", explicó Mesquida del último ponente. Fernández Mallo en lugar de exponer su teoría optó por ilustrar al público con un ejemplo práctico. "Es un proyecto llamado Niño Larva, para tratar de llegar a una metamorfosis interior. Dormí en una urna para acercarme a lo místico. Es un ejemplo de lo que hacemos algunos escritores y artistas para alcanzar lo espiritual. Primero lo hice en casa de Gabriel Lacomba, quien fotografió el proceso, y luego en otra urna en un acantilado, también con Biel" concluyó el escritor y físico.