­El juicio celebrado ayer en Madrid al cantante de rap Josep Miquel Arenas, más conocido por Valtonyc, acusado por un supuesto delito de injurias a la Corona y exaltación del terrorismo en las letras de sus canciones, quedó visto para sentencia.

La defensa del rapero reclamó ayer su absolución y alegó ante el tribunal que sus composiciones no incitan al odio ni suponen una amenaza sino que más bien son "una crítica, una sátira" reflejo de una realidad exagerada mediante hipérboles. "Hace apología de expresiones violentas que no trascienden a la realidad; es una obra de arte que empieza y acaba en obra de arte, es como si quisiéramos juzgar a (Quentin) Tarantino por su película Malditos Bastardos", señaló. El juicio se enmarcó en un contexto político, según explicó su abogado, Juan Manuel Olarieta, quien recalcó a este diario que defendió que "la letra de una canción no puede ser un delito, otra cosa es que fuera un mitin político. Se trata de algo artístico, que empieza y termina en el mismo acto creativo. Como un cuadro, que puede expresar cualquier tema y que empieza y se acaba en el mismo cuadro".

Análisis de la canción

En el juicio se analizaron frases y palabras de la canción. "La canción se transmite a papel pero si se mira un párrafo y no otro, entonces se puede sacar de contexto, se puede dar pie a interpretarse de una forma que no es".

Olarieta se refirió al estilo musical del rap en general, subrayando ese contexto en general, "el rap es provocativo", afirmó.

Por su parte Jorge Campos, acusación en este caso, expresó que se siente "acosado, despreciado e insultado".

El Ministerio Público solicitó para Valtonyc una pena de 1 año y tres meses de prisión por injuriar al Rey y otros dos años de cárcel y ocho de inhabilitación absoluta por enaltecimiento del terrorismo en tanto el insulto nunca puede estar amparado por la libertad de expresión y en este caso no existe conflicto porque sus letras no aportan opinión sino que tratan de humillar o afectar el derecho al honor de víctimas del terrorismo. El fiscal puso como ejemplos varias letras y señaló que los delitos que se le imputan quedan "perfectamente acreditado" porque se torna imposible apreciar algún derecho que justifique el uso de estas expresiones.