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Entrevista

Coque Malla: "La literatura de Dylan es bastante superior a la de Vargas Llosa"

"Mi repertorio en solitario ya es sólido, no necesita ninguna ayuda, funciona solo"

Coque Malla, un clásico del rock interpretado en castellano.

-¿Siempre ha sido libre en lo creativo?

-Sí. La única manera de afrontar la creatividad es desde la libertad.

-¿Con quién se viene a Mallorca?

-Actuaré con el pianista que me acompaña desde hace tiempo, David Lads, y será un show muy parecido al que suelo ofrecer con la banda. No será un concierto ni íntimo ni sosegado. Será un concierto de rock interpretado por dos instrumentistas.

-¿Un concierto con miradas al pasado?

-La columna vertebral del concierto será El último hombre en la Tierra pero habrá canciones de todas las épocas. Desde la nostalgia estamos rescatando canciones de Los Ronaldos, un ejercicio interesante, y eso que yo me había resistido durante todos estos años. No me gustaba cantar canciones de Los Ronaldos.

-¿Por qué?

-El repertorio nuevo, durante unos años, ha sido más frágil, por ser más desconocido. En cambio, el de Los Ronaldos es un repertorio clásico, sin fisuras, y que todo el mundo conoce. Yo sentía que había que mimar el repertorio nuevo y hacerle entender a la gente que no estaba viviendo de la nostalgia. Ahora mi repertorio en solitario ya es sólido, no necesita ayuda alguna, funciona solo. La gente acude a mis conciertos a escuchar mi repertorio en solitario. Este disco ha sido la confirmación total y ahora me puedo permitir ese lujo. El clima que se genera con mis espectáculos y el que se generan las canciones de Los Ronaldos es muy diferente, pero poco a poco se han ido aproximando. El show de este año es más alegre, más festivo, más rockero. Incluir ahí, con mucho cuidado, dos o tres canciones de Los Ronaldos, no desentona.

-¿Qué le ha revelado este trabajo sinfónico y rockero?

-Ya con la composición, cuando estaba solo en casa, con la guitarra, tomé la determinación de abrir el espectro, de probar otras armonías. Las canciones empiezan con armonía, con los acordes, y sobre esos acordes uno construye la melodía y luego, la letra. Toda mi vida he estado utilizando acordes muy básicos y de estructura muy clásica, porque es la escuela que he recibido. Con este disco me planteé desde el principio investigar otro tipo de melodías y armonías, y eso me ha llevado a la orquestación y a ampliar el espectro tímbrico.

-¿Por qué recurrió a su hermano, Miguel Malla, para la coproducción y arreglos de cuerda y metales?

-Fue una cosa bastante casual. Miguel es muy discreto y modesto, quizá demasiado, y yo bastante despistado, por lo que se juntan las dos cosas. Yo sabía que mi hermano había escrito arreglos para big band pero no era consciente de que también lo había hecho para orquestas. Hablando con un amigo común, Diego Galaz, el violinista del grupo de folk Fetén Fetén, me dijo que mi hermano les había hecho un arreglo para la Orquesta de Burgos "buenísimo". Así que le propuse trabajar juntos para algunos encargos relacionados con el cine. Y así llegamos a El último hombre en la Tierra.

-¿En qué nos equivocamos para llegar a un único hombre en la Tierra?

-Nos equivocamos y aceptamos continuamente. Pero el sentido de esa canción, El último hombre en la Tierra, no es tan apocalíptico. Es más romántico. Habla sobre aquello que te hace sentir el último hombre, o más que el último, el único hombre. Puede haber una lectura apocalíptica pero no soy tan pesimista.

-¿Qué sentimientos afloran con la escucha de este disco?

-Es un disco emocionante, que genera muchas emociones, muy variadas. Sobre él me han dicho de todo: que es cinematográfico, nostálgico, alegre...

-¿Las malas rachas hacen a un artista más fuerte?

-No lo sé. A mí lo que me hace fuerte en realidad son los teatros llenos, y últimamente la verdad es que se llenan los teatros y eso es una maravilla. Lo que me ha hecho mejor cantante y guitarrista ha sido tocar, tocar y tocar. Mi fuerza reside en el público.

-¿Quiénes fueron en su adolescencia y quiénes son hoy los ídolos musicales de Coque Malla?

-No soy muy original: los grandes clásicos como los Beatles, los Stones, Dylan, Bowie, Sinatra... Pero también la música del cine. Me he dado cuenta que mis últimos discos, si suenan tan cinematográficos como dicen que suenan, es porque tanto Miguel como yo venimos de una familia de cómicos, de actores de teatro, de cinéfilos [son hijos del actor Gerardo Malla y la actriz Amparo Valle]. Hemos bebido mucho cine en nuestra casa. La música de las películas fue mi primera influencia. Ese sentimiento cinematográfico a la hora de componer, arreglar y producir los discos siempre está ahí. Pero claro, mi escuela es el rock y el pop, aunque curiosamente mis favoritos en el rock y el pop son gente que también tienen canciones y producciones muy dramáticas, muy espectaculares.

-Ha citado a Dylan entre sus maestros. ¿Aplaudió a la Academia sueca al concederle el Nobel de Literatura?

-En eso sí soy pesimista. Creo que es una maniobra del poder para devorar lo auténticamente poético y rebelde. Pero me parece bien, no es una mala noticia y por supuesto que se lo merece.

-¿Qué opinión le merecen esas voces críticas, como el también Nobel Mario Vargas Llosa, que cuestionan y llegan a tildar de "equivocación" esa concesión?

-Le entiendo pero no comparto sus palabras. Vargas Llosa es un literato clásico de la vieja guardia de toda la vida y no habrá escuchado a Dylan en su vida, aunque igual me equivoco. No habrá escuchado ni rock ni pop ni folk. No pertenece a su universo. Por eso no entiende el valor de Dylan, que lo tiene. Sus canciones son altísima literatura y el que lo niegue es que no ha investigado ni ha leído lo suficiente a Dylan. La literatura de Dylan es tan grande como la de Dylan Thomas, y para mí bastante superior a la de Vargas Llosa.

-Después de un disco como Mujeres, un éxito, y ser padre de una niña, ¿entiende ahora más a las mujeres?

-No. Eso es una batalla perdida. Cada vez las entiendo menos pero cada vez entiendo que no entenderlas forma parte de la magia de la relación entre hombres y mujeres. Un tópico cierto. Estamos condenados a no entendernos del todo bien pero de eso se trata, de seguir intentándolo.

-¿Le ha sorprendido el PSOE facilitando el gobierno a Rajoy?

-Buff... Las preguntas políticas no me apetecen. Me aburren. Todo se ha convertido en un absurdo que se me escapa.

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