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Crítica de teatro

Mamá, quiero ser artista

Jorge Javier Vázquez le hacía ilusión hacer teatro. No es actor (ni cantante ni bailarín), pero sí una persona inteligente, y por eso se ha rodeado de este eficaz...

Jorge Javier Vázquez le hacía ilusión hacer teatro. No es actor (ni cantante ni bailarín), pero sí una persona inteligente, y por eso se ha rodeado de este eficaz, cuando no sobresaliente, equipo de profesionales. Y muy particularmente, esa maravillosa actriz que es Kiti Mánver, como la polivalente madre del protagonista, y tres jóvenes y brillantes intérpretes (que sí actúan, cantan y bailan): Edu Morlans, Alejandro Vera y Víctor González.

El contenido lo constituye la propia biografía de Vázquez. El gran público se siente atraído por la vida de los famosos, y de hecho este espectáculo sucede a su libro de memorias de 2012 La vida iba en serio (título prestado, como es sabido, de un verso de Gil de Biedma), que fue un éxito, como lo es la presente pieza. En realidad, la trayectoria vital del filólogo y presentador es tan interesante como la de cualquiera de nosotros. Es decir: poco. Sin embargo, la eficiente dramaturgia de Juan Carlos Rubio se va jalonando de comicidades (bastantes paródicas) y de números musicales que constituyen sendos aciertos. Así que uno sigue Iba en serio como una representación simpática, vistosa, que probablemente ganaría en conjunto siendo algo más breve de la hora y tres cuartos que abarca.

Se suceden escenas y diálogos no demasiado sorprendentes, pero que entretienen, y el montaje llega a su apoteosis correspondiente a todo musical, después de un fragmento (el del plató) bastante forzado y artificioso. Lleno hasta la bandera en el Trui Teatre, este domingo, y unos espectadores que desplegaron su afecto por el popular comunicador.

Iba en serio

trui teatre (Palma)

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Autor y director: Juan Carlos Rubio. Intérpretes: Jorge Javier Vázquez, Kiti Mánver, Edu Morlans, Alejandro Vera, Víctor González, Julio Awad, Paco Pepe Martínez y Belén González. Escenografía: Ana Garay. Vestuario: Tatiana de Sarabia. Iluminación: José Manuel Guerra. Coreografía: Federico Barrios. Dirección musical: Julio Awad.

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