Entre la basura y el olvido se encuentra la escultura del reconocido artista inglés Richard Long (Bristol, 1945) que el Govern adquirió en el año 2007 para instalarla en el Parc de ses Estacions. Cinc camins, que así se llama esta obra y que fue comprada por el Ejecutivo de Jaume Matas por unos 200.000 euros, se presenta hoy al visitante en un lamentable estado, dominada por la suciedad y ninguneada por el ayuntamiento de Palma, la institución encargada de velar por su mantenimiento. Fuentes cercanas al escultor, fotógrafo y pintor inglés, uno de los artistas de land art más conocidos, han asegurado a DIARIO de MALLORCA que el estudio de Long quiere "tomar cartas en el asunto".

"Están sorprendidos por la dejadez y por el estado de abandono de la escultura, y por supuesto, indignados", señalan las citadas fuentes, que aseguraron ayer a este diario que transmitirán la noticia de este "atentado" al propio Long.

Five Paths (Cinc camins) fue concebida por Long en 2004 para la galería portuguesa Mário Sequeira, con sede en Braga. Tres años después, el Govern de Matas la compró para adaptarla al Parc de ses Estacions. Inaugurada el 21 de febrero de 2007, con presencia del artista, que posó con Matas en en el Consolat y con Catalina Cirer y Mabel Cabrer en el Parc de ses Estacions, la escultura se colocó junto a la entrada del parque según se viene de la calle Miquel Marqués.

El mismo día de su presentación comenzó su deterioro, que diez años después de su inauguración se ha agravado. Hace cuatro años desapareció el camino de agua que Long bautizó como "espejo líquido" y que circundaba los otros caminos, también modificados con el paso del tiempo. Hoy, su espejo líquido ha sido sustituido por tierra y macetas y sus senderos de piedra transitan entre botellas de plástico arrojadas por los visitantes del parque, suciedad y un fuerte olor a desperdicios procedentes de decenas de bolsas de basura acumuladas a pocos metros. Poco queda de la idea original de Long, que quiso obsequiar a Palma con una obra inspirada en un jardín zen japonés.

Long, trabajos sobre el entorno

Richard Long, considerado el último artista romántico, está reconocido a nivel mundial por sus trabajos sobre el entorno. Su fama internacional comenzó a gestarse durante los años 70, cuando creó una serie de esculturas hechas como resultado de sus caminatas épicas, que le llevaron a través de zonas rurales y remotas de Gran Bretaña, y por lugares tan distantes como las llanuras de Canadá, Mongolia y Bolivia.

"Quería utilizar el paisaje como un artista de nuevas maneras. Primero empecé a hacer obra fuera usando materiales naturales como la hierba y el agua, y esto llevó a la idea de hacer una escultura al caminar. Esta fue una línea recta en un campo de hierba, que era también mi propio camino, yendo a ninguna parte", ha confesado un artista que en Palma transita hacia el olvido.

Entre los últimos trabajos de Long, seleccionado para el Premio Turner en cuatro ocasiones, se encuentra la exposición que inauguró el pasado mes de agosto en el Centro de Arte Contemporáneo de Málaga. Una muestra construida a partir de piedras de la cantera almeriense de Macael. "Es importante resaltar la idea de la variedad cósmica, cada piedra es diferente", subrayó este pionero del land art.