Si eres de izquierdas, miel sobre hojuelas. Si eres dependiente y de derechas, lo mismo o casi. Si eres independiente y de derechas, al infierno de cabeza. Que se lo pregunten a Bertín Osborne, de derechas, independiente y encima ¡con éxito!
El programa que hacía en TVE se esfuma y eso, insisto, que iba de triunfo en triunfo. En un universo competitivo, si alguien independiente y de derechas tiene éxito es que alguien de izquierdas -o dependiente y de derechas- fracasa. Y eso sí que no.
Además, ha tenido la osadía de hacer un programa con el periodista Pedro J. Ramírez y su esposa, la diseñadora Agatha Ruiz de la Prada. Anatema, anatema. A Pedro J. lo echaron de la dirección del diario El Mundo -un periódico que era como su segunda piel- por publicar aquellos mensajes de Rajoy a Bárcenas -"sé fuerte" y tal y tal y tal- que en cualquier democracia habrían supuesto la inmediata dimisión, en cuestión de horas, del presidente del Gobierno. En este ruedo ibérico lamentable cae quien denuncia. El registrador al bollo y el periodista al hoyo. La libertad de expresión no vale absolutamente nada en España.
Osborne, a la calle, y eso que pidió el voto para el PP en las últimas elecciones. Fuera, fuera.
El PP es aún más letal para la gente independiente y de derechas que la mismísima izquierda, que, no sobra recordarlo, da miedo. El presente es negro negrísimo y el futuro, hijo de lo que ocurre, pinta muy mal. En todo caso, resistiremos siquiera sea porque a quien tiene conciencia no le queda otra.
