Joan Veny, Premi d´Honor de les Lletres Catalanes 2015, señaló ayer en Palma, con motivo de la presentación de su último trabajo publicado, Perfils lingüistics balears (editorial Lleonard Muntaner), que la lengua catalana no vivirá en plena normalidad hasta que no se produzca "una actitud más abierta del Gobierno central" y este deje de "poner trabas continuamente".

"El catalán necesita ser la lengua preferente en la Administración y en la escuela, pero el gobierno del PP tiene la ideología que tiene y la va aplicando", lamentó Veny.

El también Premi Josep M. Llompart de l´Obra Cultural Balear y Medalla d´Honor i Gratitud del Consell, quiso subrayar otro problema, el de la inmigración, a la hora de referirse a una plena normalización del catalán: "Dentro del dominio catalán no se cuentan con los medios apropiados para conseguir que los inmigrantes que hablan otras lenguas puedan aprender la propia del país. Se olvidan del catalán. Los gobiernos autonómicos no tienen suficiente poder para poner en funcionamiento unos medios para lograr que los de afuera se acerquen al catalán".

En cualquier caso, el catedrático emérito de Dialectologia Catalana por la Universitat de Barcelona se muestra "moderadamente optimista" y a modo de ejemplo recurre a un episodio de la "historia, maestra de la vida: de los siglos XIV al XVII hubo desde el sur de Francia, desde Occitania, una inmigración masiva de gente. Occitania era una tierra superpoblada y sufría guerras de religión. Hubo desplazamientos masivos a Cataluña y Valencia, y en algún pueblo cercano a Barcelona de cada tres habitantes dos tenían sangre occitana y hablaban occitano. Y qué queda del occitano, casi nada. Ha habido una capacidad de absorción de asimilación imporante y eso me invita a ser optimista".

Una lingüística para la sociedad

El nuevo libro de Veny, Perfils lingüístics balears, presentado ayer en la sede del Institut d´Estudis Baleàrics, es una selección de "escritos aparecidos en medios diferentes, como congresos, jornadas, discursos, programas locales de fiestas o prensa, sobre temas diversos y con extensión variada, alternando exposiciones breves de síntesis con artículos de más profunda investigación", según el autor.

Un volumen pensado "no solo para los especialistas, también para los amateurs de la lengua, porque creo que mi lingüística tiene que estar abierta a la sociedad".

Estructurado en cinco capítulos (Història de la llengua, Lexicofrafia, Onomàstica, Dialectologia e Ictionímia), Perfils lingüístics balears aborda, entre otros muchos temas, la participación de los baleares en el I Congrès Internacional de la Llengua Catalana, donde Ramon Orlandis ya hablaba de que "tiene que haber una libertad fonética pero una unidad ortográfica".

"Esta confusión -agregó Veny- entre lengua coloquial y lengua escrita se da constantemente y habría que diferenciarla de un modo claro".

Otras cuestiones donde se detiene Veny en su volumen son la Scripta (lengua escrita en un territorio determinado) eivissenca, el diccionario mallorquín-castellano de Pere Antoni Figuera -"una obra extraordinaria", subrayó-, la lengua de los botifarres (descendientes de la antigua nobleza mallorquina) o aclaraciones sobre palabras como moscard, mosquit, nespla, micaco o el origen del nombre Aina.

"Se trata de una obra fundamental que nos servirá para escudriñar la sabiduría del doctor Veny", afirmó el rector de la UIB, Llorenç Huguet.

Por su parte, Teresa Cabré, presidenta de la Secció Filològica del Institut d´Estudis Catalans, recordó que Veny "es el primer dialectólogo que tenemos en este país, no solo por su producción, también por su historia. Para él, cada palabra es un mundo".