La batería que tocó Ringo Starr en más de 200 conciertos y que utilizó en la grabación de algunos de los primeros éxitos de Los Beatles ha sido vendida en una subasta por un valor de 2,2 millones de dólares al dueño del equipo de fútbol americano los Colts de Indianápolis, Jim Irsay.

La casa de subastas Julien's Auctions ha confirmado que Irsay compró la batería de tres piezas Ludwing Oyster Black Pearl de 1963 en una subasta celebrada el pasado viernes en Beverly Hills, California. Según Martin Nolan, director ejecutivo de esta casa de subastas, el legendario instrumento ha estado fuera de la vista del público durante 50 años.

"Miren su tamaño", dijo Starr en un vídeo para presentar el lote a subastar, "Yo quería que fuera pequeña porque así yo parecería grande", aseguró. La batería también fue utilizada por Paul McCartney para su primer álbum como solista, titulado 'McCartney'.