¿En qué momento un fotógrafo decide congelar el instante del objeto retratado? Andrés López, un experimentado realizador, productor y guionista ligado al mundo musical y documental, espoleado por el fotógrafo Pedro Coll, se aventuró en descubrir el preciso instante del clic de cinco fotógrafos mallorquines. Tokio, un punto de vista es la mirada de Pedro Coll, Gerardo Cañellas, Teresa Pou, Lluís Real y Javier Saguillo sobre una megalópolis "con una gran paleta de color y diversidad que la hacen muy interesante a la mirada", explica.

Dos semanas atrás, parte del equipo de la productora Leitmotiv P.C., y dos de los fotógrafos le tomaban la textura y la piel a una urbe del todo fotogénica. Con el apoyo del Instituto Cervantes regresarán a finales de abril, esta vez con el equipo completo.

La selección muestra un caleidoscopio de miradas diversas. Mientras Lluís Real se inclina por la "imperfección de la imagen" –es uno de los maestros en la fotografía lomográfica–, Teresa Pou trabaja el concepto con orfebrería. Gerardo Cañellas aporta su "toque de glamour" y Javier Saguillo "un aire visionario y muy juvenil". Coll es un veterano en retratar ciudades.

Tokio de noche hasta su bostezo en el amanecer, la exploración en el metro y sus historias, espectáculos de kabuki, geishas o niñas Lolita, los temores de una civilización agitada entre el pulso contemporáneo y la cultura milenaria, entre el sushi y el karaoke.

"Mi intención es hacer un documental creativo, no un producto televisivo", indica López, quien considera que "Mallorca tendrá que implicarse". Lo dice porque salvo excepciones –cuenta con el apoyo local de Sa Nostra y del Consell de Mallorca–, los interlocutores de la isla "deberían darse cuenta del potencial que tiene la isla".

De hecho, el documental es de ida y vuelta. Se completaría con la mirada de cinco fotógrafos nipones sobre Mallorca. "A los japones les interesa la cultura, no el turismo de sol y playa", apunta el realizador.

Mientras las televisiones locales no ven el proyecto, es probable que Televisión Española y el canal Arte de Francia sí les presten atención. El Instituto Cervantes en Tokio se ha volcado desde el principio en apoyarles.

Tras la filmación en la ciudad japonesa, se montará la exposición en Sa Nostra de los trabajos fotográficos como "culminación del propio documental".

"Es la exploración del mundo interior del fotógrafo a la hora de conseguir su imagen", recuerda Andrés López, quien es a su vez un ojo ávido. "Soy operador de cámara y he hecho mucha fotografía, sólo que me distancié un poco. El cine y la fotografía son mundos distintos, pero en este proyecto nos une la emoción del momento".