"Tiene sentido que Palma sea la sede los fondos de obra gráfica de Picasso que tiene la Fundación Juan March", señaló ayer el director del Museo, Manuel Fontán que ayer, junto al presidente de la fundación, Javier Gomá, recorrió la nueva piel adherida al museo. Se trata del ´gabinete´ Picasso que contendrá algunas de las obras mayores en gráfica del artista malagueño. A tal fin, el nuevo espacio, ganado a un anterior almacén, se sitúa en un lugar estratégico del que hasta ayer era conocido como Museu d´Art Espanyol Contemporani (Fundación Juan March) y que ahora acorta y precisa apelativo.

"Es lógico el cambio de nombre puesto que el Museo tiene una vocación más marcada de exponer arte moderno", indicó Fontán. El de Palma es uno de los ejes de los centros artísticos de la Fundación Juan March junto al Museo Abstracto de Cuenca y la propia fundación en Madrid. Ésta, además, tiene un comportamiento distinto ya que, tal y como recordó ayer Fontán, es donde tienen lugar las exposiciones temporales. En Cuenca su fondo artístico permanece inamovible. Entre los tres se genera un circuito expositivo.

El estreno del nuevo espacio –de pequeño tamaño, de ahí acuñar el término ´gabinete´– sirvió para mostrar uno de los grabados más importantes de Picasso, el aguafuerte La Minotauromaquia, creada en 1935 por el artista y considerada, además de uno de sus mejores grabados, "una de sus piezas más herméticas".

Precedente del Guernica, el aguafuerte tuvo una tirada de cien ejemplares, de los que uno de ellos ha sido adquirido recientemente por la Fundación Juan March. De ahí su inclusión en el Museo de Palma, como obra sobre la que bascula el resto de grabados del pintor expuestos desde el pasado verano, y que regresan ahora en diálogo con La Minotauromaquia. Hasta el 20 de febrero, el visitante podrá recorrer al Picasso más gráfico a partir de Le repas frugal, de 1904 hasta el mencionado aguafuerte de 1935.

Con motivo de la incorporación del ´gabinete´ como nuevo espacio expositivo –que irá variando su contenido en atención a los tiempos de exposición que puede soportar un formato tan frágil como la obra gráfica–, el Museo Fundación Juan March ha editado la actualización de su catálogo. En él se incluye un texto póstumo del historiador Miguel Seguí, escrito junto a Elvira González, sobre el edificio que alberga el museo.

Manuel Fontán adelantó ayer que tras Picasso, llegarán a Palma una exposición de libros de artistas, otra dedicada al escultor Pablo Palazuelo y cerrará el año 2010, una muestra de acuarelas y aguafuertes del pintor de Bolonia Giorgio Morandi.