El anuario de la novela negra en catalán se escribe desde Lloseta. La tercera edición del festival dedicado al género tendrá en noviembre como aliciente el homenaje al escritor barcelonés Andreu Martín, premiado con el Nacional de Literatura Juvenil en 1989.

El programa está prácticamente cerrado y se desarrollará en el teatro del municipio. Descorchará las jornadas el profesor de la Universitat de les Illes Balears Alexandre Casadesús, que ofrecerá el día 28 a las 19 horas una perspectiva sobre la novela negra que se produce en las islas. El experto en el género, que publicará en Lleonard Muntaner un ensayo sobre Mankell y Camilleri, cree que la producción mallorquina es "desconocida" por el gran público. "Es una lástima porque hay obras de gran calidad en las que se critica audazmente a nuestra sociedad", añade.

Los honores a Andreu Martín se reservan para las 20.30 horas. Los escritores Álex Martín y Sebastià Bennàssar justificarán la decisión del homenaje. También se proyectará material audiovisual sobre el escritor, que cerrará el festival día 30 con otra conferencia. Por lo pronto, Bennàssar, director del festival, cree que Martín "es uno de los cinco escritores más importantes de novela negra que continúa en activo". Los mallorquines Maria Antònia Oliver y Antoni Serra fueron los reconocidos en las ediciones anteriores.

Andreu Martín, que ha publicado este año Barcelona Tràgica (Ara Llibres y Ediciones B en castellano), analiza también la situación de la novela negra en catalán: "No está en su momento más álgido. Existen carencias para que los escritores puedan dedicarse a ello plenamente. La novela negra goza de muy buen estado de salud en todo el mundo, pero no es en Cataluña donde está mejor". Lejos quedó para Martín el boom catalán del género. Aquello sucedió a finales de los setenta y los ochenta. "Lo más original de España se está haciendo en el norte, en el País Vasco", incide. Los gustos del autor que inventó al inspector Ballunga siguen fieles a la novela mediterránea. Cita a Andrea Camilleri. "El tratamiento de los temas es más próximo. Los nórdicos no me interesan mucho. Los encuentro muy fríos a la hora de expresarse. Parecen desanimados, muy depresivos. Son una caricatura de sí mismos". Aun pensando así, el primer libro de la trilogía de Stieg Larsson le pareció "muy bueno".

Martín eligió el género negro porque le permite expresar las contradicciones y las paradojas de nuestra sociedad. ¿Quién es inmoral: el mundo, el hombre? Contesta el barcelonés: "¿Qué fue antes el huevo o la gallina? La moral es algo que crea el hombre. Todo lo que es inmoral acaba dependiendo de él irremediablemente".

El festival se alimentará también de las opiniones y experiencias de Jordi Canal, director de la biblioteca La Bòbila, la primera especializada en novela negra de España. Esto será el próximo día 29 a partir de las 16 horas. Una mesa redonda con editores, traductores y periodistas pondrá broche final a las jornadas.