Para ello revisó las cámaras de seguridad del bar y observó cómo un joven se llevaba la cartera. Tras publicar su imagen en las redes sociales logró dar con el autor de los hechos, un chico de 17 años llamado Rivers Prather.
El chico cometió el robo porque se encontraba viviendo en el bosque y sin dinero, situación ante la que Gilleece no hizo oídos sordos.
El propietario del bar decidió acoger al muchacho en su casa y ayudarle a encontrar trabajo, acción que ha cambiado la vida del joven Rivers drásticamente.
Por si esto fuera poco, el protagonista de esta increíble historia también hizo posible la localización de la cartera, con el anillo en su interior. Y es que Rivers sustrajo el dinero que esta contenía y posteriormente la lanzó al mar.
En otro acto de altruismo, Guilleece contrató a dos buzos con el fin de buscar la cartera robada. Para sorpresa general, los submarinistas lograron dar con ella y el anillo seguía dentro de la misma. Un final idílico para esta gran historia.