En un mundo cada vez más competitivo y egocéntrico, hay historias que nos hacen volver a creer en el ser humano. Todo ocurrió en Wisconsin (EEUU), durante una tormenta de nieve. Dos niños, de 10 y 6 años respectivamente, viajaban con su padre en coche cuando el mayor avistó algo que le llamó la atención. ''Para aquí, vamos a ayudarle'', le pidió a su padre.

En la calle se encontraba un hombre en silla de ruedas que trataba de quitar la nieve enfrente de su casa. Daniel, el padre de los niños, y sus hijos estuvieron 45 minutos echándole una mano. El hombre en silla de ruedas les agradeció el gesto, ya que al día siguiente tenía médico y debía tener despejada de nieve la cochera de su casa y las cercanías de la parada de bus.

Daniel era el padre más orgulloso del mundo y decidió compartir ese momento con resto del mundo. A través de las redes sociales se ha viralizado el post que publicó y han sido muchos los que le han felicitado por la estupenda educación que han inculcado a sus hijos. La madre, que vive en Nuevo México, también utiliza silla de ruedas, sin embargo, en tono de broma, aseguró que no había conseguido que los pequeños la ayudaran en casa.