Amancio Prada (Dehesas (León), 1949) se acerca al Monestir de La Real con la sensibilidad afinada por la poesía. Lleva el tiempo acumulado en el pelo, pero no en el ánimo creador. Recién llegado a Palma se encuentra con el director de la escolanía dels blauets de Lluc, Ricard Terrades. En varios minutos deben ensayar todos juntos en el lugar sagrado de la Serra de Tramuntana.

El cantautor leonés relata que el concierto que ofrecerá junto a los blauets esta noche a las 20 horas en la iglesia del Monestir de La Real se centra en la poesía ascética de San Juan de la Cruz, más en concreto en las Canciones del alma. La pieza principal, que cuenta con una duración de 30 minutos, es el Cántico espiritual. "Sí, aquel que comienza: ¿Adónde te escondiste, Amado, y me dejaste con gemido? Como el ciervo huiste habiéndome herido; salí tras ti clamando y eras ido". La otra media hora del concierto la ocuparán piezas como Llama de amor viva, La noche oscura del alma o Que bien sé yo la fonte que mana y corre.

Prada insiste en que en la noticia aparezcan los nombres de los otros músicos que le acompañarán, "pues en el programa no están". Además de la guitarra del cantautor, Hillary Fielding y Carlos Cardinaal rasgarán las cuerdas de dos violonchelos.

La interpretación de los blauets en la actuación de esta noche "no es preceptiva para este concierto, pues se puede hacer sin voces blancas, pero me gusta mucho la emoción y el timbre especial que aporta un coro infantil". Acaba de pronunciar Prada estas palabras, cuando de repente, como imbuido por una idea repentina, le propone a Terrades que sus chicos canten una pieza a modo de bis al final. El director de la escolanía se recoge sobre sí mismo, no acaba de tenerlo claro. Prada interrumpe: "Pon en la noticia que habrá una sorpresa".

La adaptación de San Juan de la Cruz por parte del cantautor leonés que podrá escucharse esta noche en La Real data de 1977; pese a ello, el músico cree que "una pieza musical es distinta cada vez que la tocas". Prada cantó de los 10 a los 14 años en un coro con frailes salesianos en Cambados, rodeado de parras de Albarinho. Cree mucho en los proyectos de escolanías como los blauets: "No hay mejor manera de crear formación musical cuando aprendes a cantar y además lo haces con otros".

Terrades ha estado trabajando y perfeccionando el repertorio con sus chicos durante un mes. Justifica así su labor: "Cada concierto es único y la gente te va a juzgar por ese momento". Además de ensayar y ponerles a punto la voz, también les ha explicado el sentido general de los poemas de San Juan de la Cruz.

Este concierto supone la primera actividad de la programación de la Fundació Cultural del Monestir de La Real. La actuación es gratuita, está abierta a todo el público. Habida cuenta de que el aforo es limitado, se recomienda reservar en el teléfono 620 819 756.