Estas cifras revelan que en 2007 se realizaron en España casi ocho de cada cien trasplantes que de media se practican anualmente en el mundo (unos 1.500 según Netcord, la entidad que agrupa a todos los bancos públicos del mundo) y se desprenden de datos de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) y de las respuestas de los cinco bancos privados de cordón que actúan en España consultados por EFE.

La mitad de los trasplantes de células madre de cordón realizados el pasado año se realizaron con unidades de bancos españoles, que guardaban en 2007 más de 28.000 de los 50.000 cordones almacenados de niños nacidos en España (empresas privadas guardan el resto, según datos de estas entidades).

El resto de estos trasplantes, que tratan leucemias, linfomas, otros tumores y algunas enfermedades congénitas del metabolismo, se realizaron gracias a cordones extranjeros.

Los bancos públicos estadounidenses, el mayor almacén de cordones a nivel mundial, aportaron un 28 por ciento de las donaciones, y fueron seguidos por los bancos franceses, alemanes, australianos y belgas.

Los bancos españoles donaron 95 unidades de sangre de cordón a extranjeros en 2007 y 362 en total desde 1997.

Las entidades privadas justificaron el mayor número de trasplantes provenientes de bancos públicos ya que toda la población es potencial beneficiaria de estos cordones mientras que sólo los familiares pueden utilizar los guardados por empresas privadas.

El director de la ONT, Rafael Matesanz, apuntó a EFE que un paciente puede encontrar sangre más parecida a la suya fuera de su familia que en un hermano, que puede tener incluso un grupo sanguíneo diferente.

Veinticuatro de los trasplantes practicados desde 1997 se realizaron con cordones de parientes que muy probablemente fueron almacenados en los bancos públicos como donación dirigida, explicó el jefe del servicio médico de la ONT, Gregorio Garrido.

Este depósito, en el que el cordón almacenado en el banco público se reserva para los parientes, se practica cuando un especialista certifica que una familia padece un riesgo elevado de padecer cáncer.

A pesar del crecimiento de los trasplantes de sangre de cordón, que se notó especialmente en 2006, cuando se practicaron 104, estos perdieron el año pasado el primer puesto entre las operaciones para infundir células progenitoras hematopoyéticas no procedentes del propio paciente.

Fueron superados por los 116 trasplantes realizados con células madre extraídas de la sangre periférica de donantes que suman un total de 401 desde 1999.

Las donaciones de estas células son mucho más sencillas que las de médula ósea, -origen de 47 trasplantes en 2007-, ya que basta con suministrar al donante un medicamento que facilita la salida de células madre progenitoras a la sangre periférica y luego extraerlas en un proceso que dura unas horas, explicó Garrido.

La elección de una fuente u otra depende de la disponibilidad y del peso del paciente -la cantidad de sangre almacenada en un cordón sólo es suficiente por lo general en pacientes de poco peso- si bien los trasplantes de células madre de sangre periférica exigen mayor histocompatibilidad y se pueden utilizar varios cordones en una operación, señaló el doctor.

Los trasplantes más frecuentes de progenitores hematopoyéticos son, sin embargo, los autólogos.

En ellos se extraen células progenitoras del paciente, se analizan para que no quede ninguna cancerosa y se reintroducen en el enfermo tras haber concluido la quimioterapia.

En 2007 se realizaron 1.312 de estos trasplantes, que se practican siempre como primer tratamiento, señaló el doctor.