El cine porno le queda pequeño a Nacho Vidal. Tras protagonizar unas 1.500 películas y trabajar como productor y director en otros tantos filmes, el discípulo de Rocco Siffredi prueba suerte en la música. El sábado pinchará en Tito´s.

-¿Qué placeres encuentra en las cabinas?

-La inmunidad de poder bailar sin que nadie te moleste. Entre esas cuatro paredes me siento intocable. Puedo bailar, disfrutar y aportar algo a la sala.

-¿El qué?

-César del Río, uno de mis primeros maestros en esto de la música, me dijo que lo más importante es que bailen las nenas. Si ellas lo hacen no dudes que todos lo harán.

-¿Qué música le pone cachondo?

-La música no me pone cachondo, me despierta otro tipo de sentimientos.

-¿La discoteca es el mejor lugar para ligar?

-Es un buen lugar, pero no el mejor. Yo prefiero las cenas con amigos, donde se puede hablar y no gritar.

-¿Cuál es la mejor música para practicar sexo?

-Los gemidos de una mujer. La música no me gusta para hacer el amor. Me distrae. No la necesito.

-¿Ha sido miembro de algún grupo?

-Toqué la guitarra con la tuna y la batería con un grupo punki que se llama Kakaolat. Tenía doce años y bebíamos mucho cacaolat, de ahí el nombre. En mi época estudiantil descubrí la música. No fui un buen estudiante. Me aburrían las clases. Quería vivir, era un culo inquieto.

-¿Si Rocco Siffredi es el rey del porno, quién ocupa el trono de la música?

-Michael Jackson es un dios.

-¿Ha sufrido algún gatillazo pinchando música?

-Si lo he tenido no me he dado cuenta.

-¿Ahora que se dedica a la música también se asegurará las manos?

-No tengo asegurado nada. Eso que dicen de mi pene es una chorrada.

-¿Qué busca en la música?

-Pasármelo bien. Sé que no soy ni seré el mejor DJ del mundo.

-¿Se ha retirado del cine porno?

-Produzco tres películas al mes: una de cine gay, otra de travestis y una tercera de hetero, la única en la que trabajo como actor.

-¿Podría desvincularse de ese mundo?

-Hoy por hoy, no. Llevo catorce años trabajando en el cine porno. Es lo que mejor sé hacer. Si sigo en esto es porque no conozco otra cosa que me de tanta calidad de vida.

-¿Cuál sería la banda sonora de su vida?

-La de Rocky. Como él, soy autodidacta total.

-¿Ha rodado alguna vez en la isla?

-Creo que sí, hará unos trece años. No recuerdo el qué ni dónde. Después de más de tres mil películas me resulta complicado.